¿Cómo evitar la pérdida de movilidad en el Adulto Mayor?
Con la edad y enfermedades como la artrosis se va perdiendo movilidad en las articulaciones. Sin embargo hay algunos sencillos consejos que ayudan a mejorar la vida de las personas
El proceso natural del envejecimiento tiene consecuencias directas en la capacidad de movilidad, impactando tanto en huesos como en músculos y articulaciones.
Con la edad surgen debilitamiento óseo, dolores articulares, problemas posturales y enfermedades como la artrosis, lo que influye significativamente en la calidad de vida de las personas. Estos síntomas van incapacitando a las personas en las tareas más cotidianas.
Afrontar estos cambios y mejorar el estado de ánimo de una manera activa y positiva, van a ayudar a aliviar y a recuperar la autonomía y autoestima. Uno de los principales problemas de inmovilidad son las caídas accidentales.
La movilidad durante la vejez se hace de vital importancia. Fomentar la movilidad frente a una vida sedentaria es uno de los mayores retos que se enfrentan cuando se llega a este periodo de la vida.
«La gente no se da cuenta del efecto preventivo de la movilidad a largo plazo. Incluso si no nos movemos o mantenemos una movilidad llegaremos peor a la edad geriátrica«, detalló el geriatra Beltrán Carrillo.
El ejercicio físico ayuda a mejorar la movilidad de las personas, en los adultos este debe de considerar movimientos aeróbicos, entrenamiento de fuerza, balance y flexibilidad. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda las personas mayores de 65 años dediquen 150 minutos semanales a realizar actividades físicas moderadas o bien algún tipo de actividad física vigorosa aeróbica durante 75 minutos.
Las personas mayores deben adecuar el ejercicio a su situación física y mental y a sus capacidades funcionales. El ejercicio siempre debe ser progresivo y adecuado para cada persona, en personas mayores no importa la intensidad sino el no dejar de realizarlo.
Las personas con determinados problemas de salud, comoenfermedades cardiovascularesy diabetes, deben tomar más precauciones y consultar al médico sobre cuáles son los ejercicios más adecuados para realizar.
«Si una persona se queda quieta en la cama pierde entre 1-3% de masa muscular al día. Sobre todo en personas mayores al dejar de moverse se convierten en ancianos frágiles a los que cualquier agresión de cualquier tipo puede perjudicarles, aparte de presentar en consecuencia un mayor riesgo de torpeza, caídas, fracturas, así como menos resistencia a la enfermedad«, detalló Carrillo.